Hay muchas formas de moverse en Amsterdam: tranvía, bicicleta, beerbike, carruaje, autobús, moto y coche, por nombrar algunos. Se puede afirmar que el medio de transporte ideal no es el taxi, debido a los atascos, los altos precios y la posible negativa a realizar trayectos cortos.
Afortunadamente hay una divertida alternativa que a la vez es una de esas cosas que tdan pie a posibles historias que contar en tu vida: el Disco Taxi.
El video cutre promocional que tiene es lo más (de lo menos):
[youtube https://www.youtube.com/watch?v=oxCIWF9rJJQ&w=420&h=315]
Su conductor es Maroni Sonelli, un personaje de la noche en toda regla. Ha transformado un monovolumen en una pequeña discoteca en la que no faltan la música y el buen rollo. El equipo consta de luces negras, bolas de discoteca, efectos de luz, pantallas, figuras móviles e incluso micrófono para cantar como si de un karaoke se tratara. Y lo mejor: puedes elegir el estilo de música (una vez me subí en un taxi con el peor repertorio de música holandesa de los 70 y 80 que me han forzado a escuchar).
Si decides contratarlo has de saber que caben hasta 8 personas y solo funciona de noche. Al llegar el conductor gritará el nombre de la persona que lo ha reservado por los altavoces para la calle entera sepa quien eres… Vamos, ideal para ir a una fiesta o sorprender a alguien por su cumpleaños.
Si quieres contratarlo puedes hacerlo por mail o por teléfono al 0654 698 187.